Tito Y Dania
Bendición,
No hay palabras para dar consuelo en un momento como este, definitivamente el Espíritu Santo es nuestro consolador.
Pero quiero que sepas algo, por mucho tiempo se ha debatido que si hay o no hay vida después de la muerte. Talves es algo incierto, tal es es una fantasía, tal ves es un misterio de Dios... Pero sí he aprendido algo por experiencia personal, sí la hay.
Para mí Tío René seguir a vivo en mi recuerdo, sigue vivo en el fruto de las semillas que sembró, sigue vivo en el testimonio de las vidas que llegaron a Cristo gracias a él.
Sigue vivo en el ejemplo de amor, fe, cuidado... Sigue vivo porque dejó un legado, en el que muchos matrimonios seguirán creyendo porque te amó más que a su propia vida, se entregó por completo y edificó relaciones con simplemente desvelar su corazón.
Gracias por el legado, gracias por su amor, gracias por que amó tanto a Dios que aún sin palabras predicó e hizo que el restaurador, el consolador, el Salvador, se manifestara en nuestras vidas.
Le doy gracias a Dios por el tiempo que compartí con ustedes. Nunca olvidaré que en medio de un proceso muy fuerte para mi, Dios los usó para levantarme.
Los amo desde lo más profundo de mi corazón y desde la distancia te envío un abrazo fuerte, lleno de amor y solidaridad. A ti, Erika y Juan y Jared y Jordyn


